lunes, 18 de mayo de 2015

La vida...

Me sacude una y otra vez el relámpago,
me sacude la idea que sobrelleva la nostalgia,
me sacude la muerte y la vida al mismo tiempo,
me sacuden las palabras atolondradas bajo mis dedos,
me sacude la libertad y el desasosiego, me sacude la locura y abismo,
me sacude el miedo y el desconcierto,
me sacude el odio y la violencia, me sacude el viento y las lágrimas,
me sacude la inocencia del infierno, me sacude la inspiración y me atropella,
me sacude como el invierno, llega de repente, inconsciente, como una niña
que quiere crecer demasiado rápido, maldita y bendita inspiración, maldita y bendita dulzura,
maldita y bendita vida que me enlantece y me crece dentro del ombligo como una semilla,
me ablanda y me arrodilla, me deja ciega y me encamina, me hace fuerte y me hace débil,
me cree prisionera y libre, me hace cabalgar por el mundo cayendo y a tropiezos, me persigue
y me descifra, me llena de llagas y me hace retroceder y avanzar como un mendigo,
me sabe a gloria y después me deja sola, la vida me sacude y me sacude hasta dejarme casi sin vida,
la vida me hace, me rehace y resurge entre mis uñas cuando arranco las raíces y la tierra de debajo de mis pies ensangrentados, se retuerce en mi estomago como una serpiente, me arranca la piel a tiras y se la come,
la vida me golpea hasta dejarme inconsciente, repite siempre las mismas lecciones que no conseguí aprenderme, es como un buda o un sacerdote, se cuela dentro de mi cama de noche con emociones al borde del abismo más inhumano, me recorre de parte a parte, MI SER, recorre de parte a parte mi ALMA, hasta hacerla suya e implacable vuelve a sucederme la vida, momento a momento, mientras la muerte espera, pero siempre pierde, siempre pierde mientras la vida, tan recalcitrante y testaruda vuelve para salvarme, para hacerme suya, para alimentarse de mi condena y de mis plegarias, la vida es esa que me coge de la mano cuando ya nadie queda, cuando la luz esta demasiado lejos, cuando el fuego me quema y me devora, la vida siempre me sujeta cuando caigo por el precipicio, allí esta ella esperando, como el amor más enamorado, ella siempre espera a ser vivida, a ser sentida, a ser descifrazada, a ser mordida, a ser mi amiga, ahí esta la vida esperando ser alcanzada. Y sólo tengo que alargar las manos y acariciarla, sentirla mía, saborearla y amarla.

https://www.youtube.com/watch?v=ibByYuDPVrI&index=2&list=PLfktb6HmGpp-vpQxUxPkjA5tB36ByjmEi

Irene